El domingo 18 mayo las parroquias Inmaculada Concepción de María de Villanueva Cortés y Nuestra Señora de la Asunción de Pimienta Cortés realizaron sus respectivas peregrinaciones en el marco del Jubileo 2025.
Como ya es costumbre, los fieles de ambas parroquias, acompañados de sus párrocos Saulo Zelaya y Daniel Fernández se congregaron en la Plaza Las Banderas para iniciar la caminata que fue encabezada por la cruz, seguida del grupo de monaguillos, los santos patrones de cada parroquia, carteles con mensajes sobre el jubileo y un carro parlante que animó a toda la feligresía.
El repicar de las campanas anunció la llegada de los peregrinos a la catedral Metropolitana San Pedro Apóstol, donde nuestro arzobispo, Miguel Lenihan los recibió y los invitó a pasar por la puerta de la esperanza y a participar en la celebración Eucarística.
Luego del rito de la bendición y aspersión, cada párroco derramó agua bendita a sus fieles que la recibieron con fe y esperanza.
En su homilía Monseñor destacó que uno de los aspectos importantes del año Jubilar es la peregrinación, ya que es un momento espiritual y profundo, por lo que estamos invitados a vivir la reconciliación, también estamos invitados a comulgar y a orar por las intenciones del Santo Padre.





El Arzobispo también detalló que no podemos decir que cumplimos con asistir a la peregrinación, ya que el año Jubilar continua en la iglesia, en las parroquias, mencionando que estamos llamados a ayudar a los necesitados, a los migrantes y orar por la Iglesia, por lo que se espera recoger muchos frutos en este año jubilar.
“La palabra del Señor nos ilumina y nos habla de las tres virtudes: fe, esperanza y amor, las cuales debemos vivir en la vida cristiana” concluyó monseñor Miguel.
Para finalizar el padre Saulo Zelaya, párroco de Inmaculada Concepción de María dirigió palabras a la feligresía presente, resaltando que es posible la comunión en una realidad concreta en la que se puede mostrar en el mundo la fraternidad.



